Son múltiples los factores que influyen a la hora de seleccionar un manómetro ya que el mercado ofrece varias marcas y modelos con distintas características, pero para que el proceso sea más sencillo se debe tener en cuenta el significado de la palabra S.T.A.M.P.E.D.
S.T.A.M.P.E.D. es un acrónimo que refiere a: Size (tamaño), Temperature (temperatura), Application (aplicación), Material/Media (fluido o producto), Pressure (presión), Ends (terminales), y Delivery (logística o características de entrega), lo cual ayudará a determinar qué manómetro es el adecuado para su situación específica.
Hay una simple regla mnemotécnica para recordar los siete factores determinantes para seleccionar el manómetro apropiado:
1. S – Tamaño
Los manómetros mecánicos están disponibles en una variedad de tamaños nominales, y el que usted elija, depende de sus requisitos de legibilidad, espacio y precisión. Cuanto mayor sea la carátula, más divisiones tendrán para obtener una lectura más exacta, y será más sencillo hacerlo a distancia – una consideración importante si los técnicos no pueden acercarse al manómetro. Sin embargo, algunas aplicaciones no disponen de ese espacio. Por eso, existen manómetros que van desde 1,5″ (40 mm) hasta 10″ (250 mm) de diámetro.
Otro factor para tener en cuenta es el tamaño de la conexión final, el cual determinará qué tamaño de manómetro se precisa. Por ejemplo, un manómetro de 1,5″ de diámetro es demasiado pequeño para acomodar una conexión de tamaño ½”, basándose en el área plana de la llave en proporción al perfil de la caja.
2. T- Temperatura
Tanto la temperatura ambiente como la temperatura del medio determinarán el material de las partes en contacto con el medio (acero inoxidable, aleación de níquel, etc.) y si tendrá una caja seca o estará llena de líquido. Cuanto más baja sea la temperatura ambiente, más probable es que un manómetro lleno de líquido sea la elección correcta.
Si la temperatura del medio alcanza los 60°C o más, se debe usar un manómetro de acero inoxidable, pues los manómetros en aleación de cobre y zinc están soldados, y la soldadura comienza a romperse a dicha temperatura. Los manómetros de acero inoxidable pueden soportar temperaturas de hasta 200 °C (392 °F), dependiendo de la configuración.
3. A – Aplicación
Esta letra responde básicamente, ¿para qué industria y proceso se necesita el manómetro?
Los manómetros para aplicaciones de agua potable deben estar libres de plomo, mientras que las industrias de procesos como las refinerías y las farmacéuticas requieren instrumentos de procesos industriales. Los tanques de gas criogénicos requieren una solución de presión que mida tanto la presión diferencial como la de servicio, y para el servicio con oxígeno, que estén limpios de aceites y grasas. Los manómetros utilizados en procesos sanitarios deben ser de diseño higiénico.
Para una mayor fiabilidad y una larga vida útil en aplicaciones de alta vibración, se debe utilizar un manómetro lleno de glicerina para amortiguar el movimiento y proteger el mecanismo interno del instrumento. Se debe tener en cuenta que en los ciclos de alta presión (pulsaciones), se debe utilizar glicerina junto con un restrictor o un amortiguador.
4. M- Medio
El medio que transporta la tubería y con el que el manómetro va a estar en contacto determinará el material.
Un manómetro en aleación de cobre es adecuado para aplicaciones de baja responsabilidad, pero para aplicaciones de alta responsabilidad o high critical service, se requiere materiales resistentes a la corrosión como el acero inoxidable o una aleación de níquel-cobre como el Monel.
El medio también afecta al tipo de llenado de la caja que se utiliza. La glicerina es el fluido de llenado estándar para entornos no oxidantes, mientras que los medios altamente reactivos requieren un aceite inerte como el Halocarbono o el Fluorolube.
5. P- Presión
Se debe hacer la pregunta ¿qué tipo de presión hay que medir?; ¿presión relativa, presión absoluta o presión diferencial? Segundo, ¿cuál es el rango de operación de la aplicación? Normalmente se debe seleccionar un manómetro cuyo rango sea dos veces la presión de servicio óptima, ya que esto asegura el mejor rendimiento.
Los manómetros estándar pueden trabajar hasta 20.000 psi (1.600 bar), y los especiales, hasta 87.000 psi (6.000 bar). Para mediciones de baja presión, se debe utilizar un manómetro de cápsula para detectar pequeñas diferencias de presión en unidades como milibar (mbar), milímetros de columna de agua (mmH2O), u onzas por pulgada cuadrada (oz/pulgada2).
Finalmente, ¿cuál es la escala de presión deseada? Los manómetros están disponibles en una gran variedad de unidades de medida, por ejemplo, psi, bar, kPa, inH2O. Todos los manómetros pueden ser personalizados, con doble escala, triple escala o escalas personalizadas, según las necesidades de la aplicación.
6. E – Extremo (conexiones a proceso)
¿Qué extremo o conexión a proceso se necesita? El tipo más común es el NPT. Luego, para cada tipo, se debe definir el tamaño de la conexión, bien sea ⅛”, ¼” o ½”. Y por último, la ubicación de la conexión a proceso; las dos más comunes son trasera o vertical.
7. D – Días de entrega
El plazo de entrega es algo que se debe tener presente, pues si se necesitan varios manómetros en corto período de tiempo, las opciones serán modelos estándar en tamaños nominales comunes que ya estén en stock. Pero si a diferencia se puede esperar unas semanas, podrá obtener el manómetro exacto que desee con todos los requisitos deseados.
Manómetros más comunes
Existen diferentes tipos de manómetros que se adaptan a distintas aplicaciones y necesidades. Dentro los manómetros más comunes se destacan estos cinco tipos:
- El manómetro de tubo Bourdon tipo C.
- El manómetro de espiral, helicoidal.
- El manómetro de diafragma o capsular.
- El manómetro digital (piezoeléctrico).
- El manómetro de fuelle.
Manómetro de tubo Bourdon C.
Este tipo de manómetro utiliza un tubo de forma curva, conocido como tubo Bourdon, para medir la presión de los fluidos. La presión del fluido ejerce una fuerza al interior del tubo, causando que se expanda o se contraiga, lo que se traduce en una transmisión mecánica del movimiento hacia un engranaje conectado a una aguja indicadora que permite leer en una escala graduada de la caratula del instrumento.
Los manómetros de tubo Bourdon son ideales para aplicaciones de baja y media presión, como en sistemas de refrigeración y aire acondicionado, y son muy precisos y estables. Para presiones altas (70 bar o mayores) se utiliza el tipo burdón en espiral.
Manómetro espiral y helicoidal.
Este tipo de manómetro utiliza un dispositivo de medición en forma de espiral o hélice para medir la presión de un fluido. Dicha presión ejerce una fuerza sobre el elemento, lo que hace que se doble o estire y lo que da como resultado un factor de corrección que se lee en una escala graduada. Los manómetros espirales o helicoidales son adecuados para aplicaciones de baja y media presión, como en sistemas de combustión, y son muy eficientes y estables.
Manómetro de diafragma o capsular.
Utiliza un sistema de diafragma o cápsula flexible para medir la presión. La fuerza es ejercida sobre el diafragma o cápsula, causando que se deforme, lo que se manifiesta en transmisión mecánica del movimiento hacia un engranaje conectado a una aguja indicadora que se puede leer en una escala graduada. Los manómetros de diafragma o capsular son ideales para aplicaciones de baja y media presión, como en sistemas de procesos.
Manómetro digital.
Es una opción moderna y tecnológica para medir la presión de los fluidos. Este tipo de manómetro utiliza sensores electrónicos (piezoeléctrico) para medir la presión y muestra la lectura en una pantalla digital. Los manómetros digitales son ideales para aplicaciones de alta precisión y son muy fáciles de leer y utilizar.
Manómetro de fuelle.
Este tipo de manómetro utiliza un fuelle o membrana flexible para medir la presión del fluido. La presión del fluido ejerce una fuerza sobre el fuelle o membrana, causando que se deforme, lo que se traduce en una transmisión mecánica del movimiento hacia un engranaje conectado a una aguja indicadora que se puede leer en una escala graduada. Los manómetros de fuelle son ideales para aplicaciones de baja y media presión, como en sistemas de refrigeración y aire acondicionado.