Generalmente una junta se cambia cuando sufre un daño inminente ya que actúa como fusible en un sistema de tuberías. Los daños pueden llegar a ser ocasionados por diferentes factores como lo son:

  • Golpe de ariete: Incremento de presión por cambio de velocidad en un fluido.
  • Sobrepresión: Presión por encima de la presión de trabajo normal del sistema.
  • Pandeo por columna: Rotación de un plano de una o más ondas de un fuelle.
  • Altas temperaturas: Para el caso de las juntas de expansión, es una temperatura a la cual el material empieza a perder propiedades físicas.
  • Torsión en los sistemas: Cualquier movimiento de rotación que reciba una junta es causa de daño ya que los fuelles no están diseñados para recibir torsión.
  • Incompatibilidad de materiales con el fluido: Material inadecuado para el fluido que se trabaja.
  • Tubería mal soportada: Un tubo debe ir soportado de acuerdo a una norma y con especificaciones técnicas según su comportamiento.
  • La línea sin puntos fijos: Los puntos fijos son una restricción en todos los sentidos, para direccionar el movimiento de un tubo.
  • Juntas sin tensores: Tensores (tie rod) limitan la fuerza de reacción por presión en caso de no existir puntos fijos.
  • Memorias de cálculo por fuera de lo permisible: Valores según cálculos de resistencia y esfuerzos admisibles para determinar cargas.
  • Mala selección de junta para movimiento inadecuado: Cada junta de expansión cumple con un movimiento específico, el cual se debe tener en cuenta al momento de su selección.
  • Frecuencias muy altas: La amplitud muy grande de una frecuencia, fatiga el material del fuelle, por tal motivo se debe revisar el movimiento lateral máximo.

En general una junta con una selección correcta no generará problemas y su tiempo de vida útil se prolonga por hasta más de 10 años. Una junta tiene determinados ciclos de vida según un cálculo EJMA que se realiza al momento de su fabricación y es entregado al cliente para que haga la proyección de cambio o mantenimiento.

Si un proceso demanda hacer un cambio por daño en la junta, se debe entrar a revisar y diagnosticar lo que hizo que la junta se dañara. Esto se realiza haciendo un recorrido en la tubería en la cual está instalada, y una revisión puntual de las condiciones de operación del sistema. A partir de este punto, se puede pasar a realizar un estudio de flexibilidad para determinar fuerzas, momentos esfuerzos y de esta manera dar las recomendaciones pertinentes.